En el SIJA no nos hemos ido de vacaciones y seguimos con nuestra actividad; aunque de forma distinta:
Aprovechando el verano, nos reunimos con nuestr@s chic@s tres días por semana (martes, miércoles y jueves) y hacemos diferentes actividades típicas (piscina, salidas como Rascafría o Parque de atracciones, etc) y no tan típicas de esta época, pero que se disfrutan más si puedes dedicarle más tiempo.
Este es el caso de la última actividad que hemos realizado en nuestro servicio: el jueves pasado, disfrutamos de un taller de Arteterapia de la mano de Ana, una de las profesionales del CMS de San Blas, que vino encantada a conocer y ofrecer una sesión muy diferente a nuestr@s adolescentes.
Para iniciarnos en la sesión hicimos una lluvia de ideas dónde plasmamos a qué nos sonaba esto de la arteterapia. La cuál al final de la sesión retomamos para descubrir que no íbamos tan desencaminad@s y qué consiste en utilizar el arte para expresar nuestras emociones creando nuestras propias obras (de este taller hemos aprendido que tod@s tenemos un pequeño gran artista dentro).
El proceso creativo así en frío no sale, así que Ana nos invitó a realizar unas cuantas dinámicas que nos fueron conectando con nuestras emociones y con el/la artista que llevamos dentro.
Así, poquito a poco, elegimos una o varias imágenes, colocadas previamente por todo el espacio, y que de alguna manera nuestro cuerpo nos pedía que cogiéramos.
Con ellas y con un montón de diversos y variopintos materiales nos dispusimos a crear nuestras obras, dando forma a esas imágenes en una historia creada por cada una de las personas que estábamos disfrutando del taller con una melodía de fondo que nos ayudaba a transportarnos a nuestra obra cómo si no hubiera nada más.
Al terminarlas, le pusimos un título y le buscamos un hueco en nuestra sala. Así, cómo si de una se tratara, fuimos recorriendo las obras de nuestr@s compañer@s, explicándonos su historia y el proceso creativo que habían tenido para desarrollarla.
Todo un lujo y un placer de taller; sin duda, volveremos a repetir.
